Un laboratorio limpio y desinfectado es fundamental para evitar contaminaciones e interferencias en los resultados, especialmente en un entorno de diagnóstico como el de Zenit.

Mantener condiciones óptimas no solo facilita el trabajo del personal, sino que también minimiza errores.

En este contexto, la luz UV se destaca como una herramienta germicida altamente eficaz, capaz de eliminar o reducir la carga de microorganismos como las bacterias, lo que contribuye directamente a la prevención de contaminaciones. Esta tecnología permite desinfectar áreas críticas, como las mesas de trabajo y cabinas de flujo, garantizando así la precisión y confiabilidad de los resultados obtenidos.